Un año más los Señores de la Guerra vienen a Madrid a exponer sus mercancías de muerte para hacer negocio con la compraventa de armas y así aumentar beneficios para sus respectivas empresas. Desarma Madrid sigue siendo voz crítica contra el negocio que alimenta las guerras que provocan la destrucción, el dolor y la muerte, generalmente lejos de casa, pero que nos alarma cuando se acercan, como ahora con la guerra en Ucrania. Con el lema “La guerra empieza aquí, parémosla aquí”, esta charla -coloquio en el Teatro del barrio de Madrid, el 25 de marzo, abre un debate más que necesario sobre la contribución española a los conflictos, con ferias de armas como esta y con una militarización de la economía que nos hace estar entre los 10 principales países del mundo productores y exportadores de armas. En definitiva, somos cómplices de un negocio criminal, del que solo unos pocos sacan beneficio, y que provoca enorme miseria y destrucción.
Del 17 al 19 de mayo el IFEMA de Madrid alojará a la tercera edición de la bianual Feria Internacional de Defensa y Seguridad de España (FEINDEF) según sus organizadores, con más de 400 empresas que ya han reservado los 40.000 m. cuadrados de exposición, con 25 países participantes y más de 100 delegaciones internacionales. Lo primero que sorprende es el nombre: Feria Internacional de la Defensa y Seguridad. ¿Por qué no llamar a las cosas por su nombre: “Feria Internacional de Armas para la Guerra”? Sería, sin duda, un título más ajustado a la realidad, claro y descriptivo. Antes de asegurar que las armas sirven para la defensa tendríamos que preguntarnos ¿la defensa, de que?, ¿defendernos, de quién? Para creer que una feria de armas nos va a dar más seguridad hay que tener una fe ciega en el militarismo. Lo evidente e históricamente contrastado es que las armas matan, que son muy eficaces en procesos de dominación, sometimiento, expolio y control de los pueblos, pero incapaces de defender Derechos Humanos, una vida mejor para las mayorías, un mundo más habitable y hospitalario o una Seguridad Humana para todas: acceso a la sanidad, la educación, la cultura, la vivienda, los servicios sociales, la alimentación, el agua, aire sano…todo lo que nos da seguridad y nos permite un vida digna. Lejos de ello, la inversión en armamento y gasto militar supone un despilfarro de recursos que atenta contra la vida digna y la seguridad de las personas y del planeta. Cuando la emergencia climática amenaza la supervivencia de millones de personas, de especies y de espacios en todo el planeta, el gasto militar es un despilfarro intolerable, un abuso de poder de militarismo, de las políticas y de los políticos que lo ejecutan. Tenemos la desgracia de tener el gobierno más militarista de la democracia, con un aumento espectacular del gato militar que sigue creciendo en cada consejo de ministros. Se calcula que el gasto militar en España para 2.023 no bajará de los 48.800 millones de €, eso sí, disfrazado en partidas de otros ministerios y organismos.
Animamos a todas las personas que quieren poner la vida en el centro, que defienden los derechos humanos y de la tierra, que trabajan por la seguridad humana de las personas más desprotegidas, a participar en este acto, a mostrar su oposición a la feria de armas, a la militarización de la economía, de las mentes, de las fronteras y los territorios, a oponerse a las guerras y a quienes las hacen, las financian, las jalean y sacan beneficio de ellas.
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