Capítulos previos de resistencias civiles: Ghana, Zambia, Mozambique, Argelia, Egipto, Irán, Palestina, Birmania, Bangladés, Papúa Occidental, Hungría, Polonia, Kosovo, Estados Unidos y Cuba.
Opino que es un bello ejemplo de resistencia civil y de actuación noviolenta aunque haya tenido que repensarlo porque la idea me estalló la cabeza. La iniciativa se denomina Think Tank Ghana y se dedican (o dedicaban, no lo sé a ciencia cierta) a establecer un laboratorio de ideas en los países en desarrollo para invitarles a proponer soluciones a problemas del primer mundo. Genial: el mundo al revés.
Genial porque decide invertir los papeles: quienes toman las decisiones son los países en desarrollo que normalmente no deciden nada. Y genial porque ell@s identifican los problemas y toman la actitud propositiva y activa.
La ayuda, por cierto, han de implementarla los propios países del primer mundo buscando dónde hacerlo, con quién realizarlo y las fuentes de financiación necesarias.
Quiero dedicar un momento a reflexionar sobre la filosofía que subyace en la iniciativa:
- Los países del primer mundo también tenemos problemas. Incluso, en muchas ocasiones somos los causantes de los problemas de los países en desarrollo.
- La gente de los países en desarrollo saben identificar nuestros problemas y pueden proponer soluciones y aportar iniciativas que intentan solucionarlos. Es decir, no son seres pasivos e indecisos a la espera de ayudas y salvación del primer mundo.
- Los países del primer mundo aprenden a ser humildes asumiendo que otros identifiquen sus problemas y les apoyen con propuestas de soluciones
- La iniciativa se aleja de la caridad y de enfoques de las relaciones internacionales en las que habitualmente una parte da y decide (primer mundo) y la otra parte recibe (países en desarrollo)
Quizá la idea sea un ejemplo prometedor para nuestras relaciones internacionales con Marruecos (habitualmente tachado como el país enemigo desde el paradigma de dominación-violencia imperante). Quizá sea un modelo a seguir desde el paradigma de cooperación-noviolencia para el tratamiento de positivo y noviolento del problema con Marruecos. Le veo ventajas innegables y muy interesantes:
- Se fija en activar a la gente y no en las políticas gubernamentales que invariablemente ya sabemos lo que ofrecen: sobre todo militarismo, separación, creación de enemigos y poquísimas pinceladas de cooperación
- Dota de poder de decisión a ambas poblaciones
- Abre vías de análisis participativas que seguramente aporten iniciativas más creativas y noviolentas que las políticas nacionales
- Ambas poblaciones se comprometen con las soluciones del otro lado, lo cual puede fomentar un efecto de colaboración real
A continuación vamos a presentar tres de los proyectos de Think tank Ghana para concretar sus propuestas.
Proyecto en la frontera mexicana
Es una pena que no se dé demasiada información por escrito sobre este proyecto en la frontera mejicana. Pero algunos datos son muy reveladores:
- Se trataja tanto con los “dos bandos”: inmigrantes recientemente deportados en Tijuana, trabajadores indocumentados en San Diego (USA) y, por el otro lado, las patrullas fronterizas civiles como los Minutemen, los grupos «Patriotas» y las organizaciones nativistas.
- Es un proceso de escucha y diálogo a largo plazo: “nos hemos reunido con estos grupos opuestos durante 2 años para recopilar problemas y soluciones, y estamos comenzando a elaborar estrategias con los grupos de Minutemen para implementar las soluciones de los grupos de expertos de inmigrantes”.
Proyecto Refugiados africanos en Israel
En 2014, la galería ArtPort de Tel Aviv invitó a Ghana ThinkTank a colaborar con la curadora Maayan Sheleff para crear un intercambio entre los refugiados africanos que buscaban asilo en Israel y los residentes locales a los que les molestaba su presencia.
Trabajando con solicitantes de asilo sudaneses y eritreos junto con israelíes locales, organizaron grupos de expertos que recopilaron los problemas de los residentes del barrio abandonado del sur de Tel Aviv, así como de los refugiados africanos que viven en ese mismo barrio. Pidieron a cada grupo que resolviera los problemas del otro. Los miembros de la comunidad, los grupos de expertos organizados y las organizaciones locales crearon planes para implementar las soluciones propuestas. Las soluciones incluyeron una patrulla civil exclusivamente femenina vestida con uniformes de tela africana.
Otra iniciativa fue la exposición “Infiltrados” de cuya presentación seleccionamos unos párrafos:
Hasta la fecha, aproximadamente 50.000 solicitantes de asilo de África, la mayoría de los cuales huyeron de la persecución étnica o política en Sudán o Eritrea, viven en Israel y solicitan reconocimiento como refugiados.
La política de Israel con respecto a estos solicitantes de asilo es de no deportación, basada en el supuesto reconocimiento de que su vida correría peligro si fueran devueltos a sus países de origen. Al mismo tiempo, hasta hace poco tiempo, Israel no examinaba ninguna de esas solicitudes de asilo y los solicitantes no tenían posibilidad de recibir el estatuto de refugiado.
Según datos proporcionados en 2012 por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, el 83,6% de los eritreos y el 69.3% de los sudaneses que presentan solicitudes de asilo en varios países son reconocidos como refugiados según los estrictos estándares del tratado de refugiados de la ONU. Por el contrario, el porcentaje de solicitantes de asilo reconocidos como tales en Israel es solo del 0,2% e incluye solo a dos eritreos y a ningún solicitante de Sudán.
Los solicitantes de asilo que terminan en Israel permanecen así en un estado intermedio: no son deportados, pero su estatus no está regulado y no se les otorgan derechos básicos. En los últimos meses, miles de solicitantes de asilo fueron citados al centro de detención “abierto” de Holot, donde permanecen indeterminados en un intento de alentarlos a regresar a sus países de origen o a un tercer país africano en un proceso denominado “consensuado” de partida.
La exposición se llevará a cabo junto con una serie de debates, actuaciones, presentaciones y visitas guiadas dirigidas por algunos de estos participantes y que representan sus propios puntos de vista sobre la situación, el proceso y el resultado artístico. El propósito de esta estrategia, sin embargo, no es solucionar el problema de los refugiados como un “problema” local relegado al sur de Tel Aviv, como suelen hacer los medios de comunicación o varios funcionarios, sino más bien revelar cómo este problema es relevante para todos nosotros.
Mitrovica (Kosovo).
Mitrovica es una ciudad de Kosovo dividida por un río. Al norte están los serbios. Al sur están los albaneses. En el medio hay un puente, custodiado por tropas internacionales con vehículos militares. Después de la guerra de Kosovo, Mitrovica se convirtió en un símbolo de las divisiones étnicas de Kosovo. Cuando Ghana ThinkTank comenzó un proyecto allí en 2011, encontraron personas en ambos lados que no habían cruzado el puente desde que comenzó la guerra en 1999.
Ghana ThinkTank aplicó su proceso a Mitrovica, recopilando problemas en un lado del río Ibar y enviándolos al otro lado para que los resolvieran.
Problemas como “No me siento seguro para cruzar el puente” y “Me siento como un invitado en mi propia casa”, demostraron el aislamiento devastado por la guerra que sentían las personas de ambos lados.
La experiencia estuvo llena de esperanza y miedo, pero al final, las personas que no habían cruzado el puente desde que comenzó la guerra cruzaron para trabajar con el otro lado.
En conclusión, una idea comprometida, basada en el diálogo y en la participación igualitaria de ambos bandos. Una idea llevada a cabo por grupos de base y de forma horizontal. Noviolencia 100 x 100.